5 etapas de una buena gestión de proyectos

La gestión de proyectos es una de las partes principales de las carreras virtuales en administración de empresas. Descubre todo sobre la licenciatura en línea de Saint Leo.

La gestión de proyectos es una disciplina que une varias metodologías con un único fin: la planificación y dirección de los procesos de un proyecto. Cada proyecto es un conjunto de operaciones determinadas diseñadas para lograr un objetivo: con un alcance, recursos, inicio y final establecidos. Los profesionales que llevan a cabo los proyectos tienen tres objetivos principales: controlar el inicio y la evolución de un proyecto, responder ante los posibles problemas que puedan surgir a lo largo del proyecto, y facilitar su finalización y aprobación.

La dirección de proyectos está principalmente destinada a conseguir todos los objetivos y metas establecidas, que en las empresas, otorgan un beneficio significativo, ya sea crear resultados, consecuencias, beneficios o determinados objetivos estratégicos. Así, por ejemplo, pueden ser: crear una nueva sede de la empresa, mover a los empleados a otra oficina, o duplicar las ventas en un año. 

5 etapas de la gestión de un proyecto

El Project Management Institute (PMI) es una institución encargada de ofrecer formación y certificaciones en dirección de proyectos. Las 5 etapas que establece el PMI son: 

1- Análisis de la viabilidad: el objetivo principal de esta fase es ver cuán realizable es el proyecto, para decidir si sigue adelante o no. Así, la empresa puede decidir si el beneficio del proyecto supera a la inversión, y las posibilidades de concretarse con éxito. Un buen análisis debe contener:

1. Un registro de seguimiento.

2. Análisis del alcance del proyecto, la metodología a considerar, los trabajadores que lo llevarán a cabo, entre otros. 

3. Tener en cuenta los riesgos del proyecto. 

4. Analizar los costos y los beneficios.

2- Planificación de tareas: en esta fase la meta es detallar todas las tareas a realizar y los recursos para llevarlas a cabo. Además, se debe poner todas alas actividades en un plazo determinado de tiempo, considerando el análisis de viabilidad anterior. 
3- Ejecución: en esta fase, las empresas deben aplicar todas las técnicas disponibles para la ejecución de los procesos. 

1. Se establece el entorno de trabajo:

2. Se ejecutan todas las tareas expuestas en la planificación.

3. Si se necesitan cambios, se los gestiona. 

4- Seguimiento y control: esta fase es una de las más importantes del proyecto, dado que se controla si todo lo planteado en los objetivos se está cumpliendo, y si se están superando las expectativas. El control permite responder a los problemas de manera temprana y más adecuada posible. 

1. Se controlan las tareas planificadas. 

2. Se elaboran informes de seguimiento.

3. Se gestionan los problemas que puedan surgir en el proyecto. 

5- Cierre del proyecto: esta etapa implica analizar verificar la efectividad del proyecto. 

1. Se cierra el proyecto de manera formal.

2. Se respaldan los datos obtenidos con el proyecto.

3. Se comparan los resultados con las estimaciones iniciales. 

Te invitamos  a complementar esta lectura con nuestro artículo ¿En qué consiste la administración de proyectos y en qué se enfoca la metodología ágil?

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