Las ocho reglas de oro del diseño de interfaces de Ben Shneiderman
Kassandra Ortega
Última actualización: 29/05/2024
Consistencia, usabilidad universal, retroalimentación informativa, prevención de errores y reversión de errores, son algunos de los principios que deben seguirse para diseñar interfaces de usuario exitosas. Descubre de qué trata cada uno de ellos desde la perspectiva del experto Ben Shneiderman.
Ben Shneiderman es un científico informático estadounidense experto en el tema de Interacción Humano-Computadora. Su libro Designing the User Interface: Strategies for Effective Human-Computer Interaction, es una obra popular en la industria del diseño de interfaces, donde hace mención de “ocho reglas de oro” o principios clave que se deben seguir para lograr un diseño de interfaz exitosa.
“Estos principios, derivados de la experiencia y refinados durante tres décadas, requieren validación y ajuste para dominios de diseño específicos. Ninguna lista como esta puede estar completa, pero incluso la lista original de 1985 ha sido bien recibida como una guía útil para estudiantes y diseñadores” explica Ben Shneiderman, en el resumen sobre su libro en 2016. A continuación, queremos compartirte la perspectiva de este experto y ayudarte a convertirte en un excelente Diseñador UI, por lo tanto, te recomendamos guardar esta nota en tus favoritos.
Lee también Jesse James Garrett: más que un experto en Diseño UX, un líder que ha transformado el mundo digital.
¿Qué principios se deben seguir para el diseño de la interfaz perfecta? 8 reglas clave según Ben Shneiderman
1. Esforzarse por la consistencia
“Deben usarse secuencias consistentes de acciones en situaciones similares”. Este principio habla sobre la importancia de utilizar la misma terminología en las indicaciones, los menús y las pantallas de ayuda. Además, hay que emplear colores, diseño, mayúsculas, fuentes y otros elementos de manera uniforme en todo el proyecto, y por último, las excepciones, como los mensajes de la no repetición de las contraseñas, deben ser comprensibles.
2. Buscar la usabilidad universal
Se trata de reconocer las necesidades de diversos usuarios y diseñar para la plasticidad, es decir, que puede ser moldeado, ya que facilita la transformación del contenido. “Agregar funciones para principiantes, como explicaciones y funciones para expertos, como accesos directos y ritmo más rápido, enriquece el diseño de la interfaz y mejora la calidad percibida” explica Ben Shneiderman.
3. Ofrecer comentarios informativos
De acuerdo con este experto, para cada acción del usuario, debe existir una retroalimentación de la interfaz. Su consejo es que, para acciones menores y frecuentes, la respuesta sea modesta, mientras que, para acciones más importantes o infrecuentes, la respuesta sea más extensa y que especifique.
4. Diseñar diálogos para producir un cierre
Todas las secuencias de acciones deben organizarse en grupos con un principio, un medio y un final y se les debe informar a los usuarios el estatus de dichas acciones. Ben Shneiderman asegura que dar una retroalimentación informativa a los usuarios, después de terminar una acción en una página, les brinda la satisfacción de haber logrado algo, una sensación de alivio o una señal para dejar de pensar en planes alternativos en caso de que se presente un inconveniente.
Por ejemplo, las páginas de e-commerce guían al usuario por diferentes etapas que van desde la selección de productos hasta el pago, y termina el proceso con una página de confirmación clara donde se muestra la transacción completa, con un resumen de la compra y otras indicaciones como fechas de entrega, y es esta retroalimentación lo que brinda una sensación de tranquilidad.
5. Prevenir errores
En medida de lo posible, hay que diseñar la interfaz para evitar que los usuarios cometan errores graves, por ejemplo, desactivar elementos del menú o completar incorrectamente un cuestionario. “Si los usuarios cometen un error, la interfaz debe ofrecer instrucciones simples, constructivas y específicas para la recuperación”. La interfaz debe estar diseñada para que las acciones erróneas no manipulen el estado del sitio y que sea posible continuar navegando.
6. Permitir la reversión de acciones
Es común cometer errores, por lo tanto, en la medida de lo posible, las acciones deben ser reversibles. Esta función alivia la ansiedad, ya que los usuarios saben que los errores se pueden deshacer y fomenta la exploración de otras opciones.
7. Mantener a los usuarios en control
Ben Shneiderman explica, en su libro, que los usuarios experimentados desean tener la sensación de que están a cargo de la interfaz y que la interfaz responde a sus acciones. En otras palabras, no les agradan las sorpresas ni los cambios, también les molestan las tediosas secuencias de entrada de datos, la dificultad para obtener la información necesaria y la incapacidad de producir el resultado deseado, por lo tanto, para que un usuario se sienta satisfecha, hay que cederle el control sobre lo que realiza en la interfaz.
8. Reducir la carga de la memoria a corto plazo
De acuerdo con la neurociencia y la psicología, las personas tienen una capacidad limitada para el procesamiento de información en la memoria a corto plazo, por lo tanto, es clave que los diseñadores eviten las interfaces en las que los usuarios deben recordar la información de una pantalla para luego utilizarla en otra. Esto explica por qué los teléfonos celulares no requieren del reingreso de números telefónicos, las ubicaciones de los sitios web permanecen visibles y los formularios extensos suelen compactarse en una sola pantalla.
Te invitamos a complementar esta lectura con nuestro artículo Diseño UI: la interfaz de usuario y sus componentes.
Ben Shneiderman menciona que estos ocho principios deben interpretarse, refinarse y extenderse según el contexto de cada proyecto. “Tienen sus limitaciones, pero proporcionan un buen punto de partida para los diseñadores móviles, de escritorio y web” asegura el experto.
Estos principios presentados se focalizan en aumentar la productividad de los usuarios, al proporcionar procedimientos simplificados de ingreso de datos, pantallas comprensibles y retroalimentación informativa rápida, para incrementar la sensación de competencia, dominio y control sobre el sistema, lo que al final del día, son aspectos clave para que la experiencia de usuario sea satisfactoria.
¿Te interesa aprender sobre diseño de interfaces? ¡Da tus primeros pasos con Saint Leo University!
Inicia en el mundo de la informática, la programación y el diseño de interfaces estudiando en la Ingeniería en Sistemas Computacionales de Saint Leo University. En esta carrera 100% en línea y en español, podrás acceder a las herramientas necesarias para afrontar cualquier reto del sector de la informática, y con las cuales podrás aspirar a puestos profesionales como gerente de proyectos de TI y desarrollador web, dos roles clave en cualquier equipo de trabajo de UX. Los cursos pueden incluir temas como sistemas informáticos, arquitectura informática, diseño y análisis de sistemas, programación y conceptos de bases de datos, introducción a las aplicaciones web, desarrollo de aplicaciones móviles, entre otros.
Para recibir mayor información, solos tienes que completar el formulario de admisión, o escribirnos un correo a estudiantes@worldcampus.saintleo.edu para que uno de nuestros asesores se comunique a la brevedad.
¡Conviértete en tu mejor versión estudiando en Saint Leo University!